miércoles, 24 de julio de 2013

El Perú es un volcán de corrupción

El gobierno del presidente Ollanta Humala ha concretado un pacto con la derecha, con las empresas transnacionales para profundizar el continuismo neoliberal, aplicando reformas laborales reaccionarias, discriminatorias como la Ley Servir y otros en contra de los derechos de los trabajadores. Estas medidas “es la confianza” otorgada a la Confiep y a los partidos políticos corruptos de la derecha.

Para la derecha la modernización del Estado es más privatización, es capturar el Estado por parte de los poderes fácticos para ponerlo al servicio de sus intereses. Por eso el Gobierno de Ollanta Humala ha capitulado con la mafia fujimorista y los partidos corruptos de la derecha para asaltar el Tribunal Constitucional, la Defensoría del Pueblo y el Banco Central de Reserva. Ello es la expresión de la descomposición moral del neoliberalismo, de lo viejo que tenemos que derrotar. Ante esta situación saludamos y respaldamos la respuesta del pueblo y particularmente de la juventud que logró hacer retroceder a los congresistas de la derecha corrupta en la anulación de la repartija, sabremos mantenernos vigilantes para derrotar cualquier maniobra en contra del pueblo.

Demandamos la anulación de la elección de los altos funcionarios del Tribunal Constitucional, Defensoría del Pueblo y el Banco Central de Reserva y se convoque al Pleno para que se apruebe realizar la votación uno por uno y no en bloque, ver el mecanismo de elección y las nuevas propuestas que sea en base a un concurso.

Para la Izquierda, para las fuerzas progresistas y populares la modernización del Estado es desprivatizar, democratizar y efectuar una reforma integral del Estado. Supone acabar con la captura del Estado y ponerlo al servicio del interés general, que las políticas públicas (educación, salud, seguridad ciudadana y otros) sean de calidad y lleguen a toda la población. Ello supone que sean iguales para todos; es decir, extender el Estado a todo el territorio Nacional. Ahora, a un tercio de los peruanos no llega el Estado, y al resto llega tarde y mal.

Para que verdaderamente el Estado sirva a los peruanos, tenemos que cambiar la Constitución Política. Por eso los trabajadores, los frentes regionales, las organizaciones vecinales, organizaciones políticas de izquierda, jóvenes, mujeres de la ciudad y el campo; se rebelan ante tanta injusticia, ante el abuso, ante la discriminación. La Jornada del 4 de julio es la expresión de protesta de miles de hombres y mujeres de la ciudad y el campo ante el grave deterioro de las condiciones de vida y un claro deslinde contra las medidas económicas neoliberales del Ministro de Economía Luis Castilla. Es una contundente confrontación entre quienes defienden el neoliberalismo en decadencia en el mundo y quienes apuestan por la transformación económica de nuestro país, expresado en la plataforma del Comité Nacional Unitario de Lucha (CNUL). Por Democracia, Dignidad y Trabajo.

Ante la protesta del pueblo el gobierno ha respondido violenta y selectivamente, reprimiendo a los dirigentes sindicales de la CGTP y el Partido. César Soberón, dirigente del Sindicato de Construcción Civil Región Chiclayo y militante de la JCP fue brutalmente agredido. Expresamos nuestra condena a los actos represivos y exigimos sanción a los responsables de tan condenable actitud, nuestra solidaridad con el camarada César Soberón.

El PCP expresa su solidaridad y respaldo con las luchas de los gremios: médicos, enfermeras, tecnólogos médicos, sindicato Relima y otros en su justa reivindicación.


Respaldamos también con la misma energía la Marcha Cívica Patriótica nacional del 27 y 28 de julio convocada por las diversas fuerzas laborales, políticas y sociales en contra del gobierno por la ofensiva antilaboral y represiva. Por la derogatoria de la nefasta Ley del Servicio Civil, contra el alto costo de vida y los combustibles, por una verdadera autonomía universitaria y por la solución de los conflictos laborales y sociales. Esta será una oportunidad que el pueblo con sus organizaciones como la CGTP - CNUL diremos al gobierno que la lucha continúa; por una verdadera transformación.

martes, 9 de julio de 2013

LA UNIDAD Y LUCHA DE LOS TRABAJADORES OBLIGA A OLLANTA HUMALA A LLAMAR AL DIÁLOGO. SI NO HAY SOLUCIÓN, LA LUCHA CONTINÚA‏

Por: Grimaldo Cerna Malaver

Luego de la contunde Jornada Nacional de Lucha del  jueves  4 de julio,  el presidente Ollanta Humala ha expresado  su disposición al diálogo con la CGTP y los dirigentes de los trabajadores estatales para tratar problemas laborales en agenda, siendo el prioritario la Ley del Servicio Civil. Como se sabe, esta ley  ha merecido rotundo rechazo en todo el país ya que amenaza  el derecho a la estabilidad laboral mediante despidos y niega la negociación colectiva; ambos derechos consagrados en la Constitución Política del Estado y los Tratados que el Perú ha suscrito con la OIT.

Por su parte el propio Humala insiste que “esta  ley es en beneficio de los trabajadores, la modernización del Estado y que no generará despidos”.  La CGTP, la CUT-Perú y los  trabajadores estatales, simplemente no le creen ni a él ni a sus ministros.

Mario Huamán, Secretario General de la CGTP ha saludado esta disposición de Ollanta Humala y dijo estar a la espera de una comunicación formal de Palacio de Gobierno. En igual forma se ha pronunciado Winston Huamán de la Confederación Intersectorial de los Trabajadores Estatales (CITE).

Los trabajadores, manteniendo su independencia de clase, siempre han mostrado disposición al dialogo para la solución de los problemas que los agobia, es la negativa permanente e intransigencia de las autoridades y de los empresarios lo que obliga a las organizaciones sindicales a tomar acciones de lucha para hacer respetar sus derechos. Si no hay solución la lucha continúa.